Month: febbraio 2009

Waiting for Godot – S. Beckett

GOGO Mi domando se non sarebbe stato meglio restare da soli, ciascuno per conto suo. Non eravamo fatti      per seguire la stessa strada.

DIDI Non è sicuro.

GOGO No, non c’è niente di sicuro.

DIDI Possiamo sempre lasciarci, se credi.

GOGO Ormai non vale più la pena.

DIDI Allora andiamo?

GOGO Andiamo.

 

Non si muovono.

 

[…]

 

DIDI Sei di nuovo qui! Vieni che ti abbracci.

GOGO Non mi toccare!

DIDI Vuoi che me ne vada? Gogo! Dove hai passato la notte?

GOGO Non mi toccare! Non domandarmi niente! Non dirmi niente! Resta con me!

DIDI Forse che ti ho mai lasciato?

GOGO Mi hai lasciato andar via.

 

[…]

 

DIDI Sentivo la tua mancanza… e nello stesso tempo, ero contento. Strano, no?

GOGO Contento?

DIDI Forse non è la parola giusta.

GOGO E adesso?

DIDI Adesso… rieccoti qui… rieccoci qui… rieccomi qui.

GOGO Vedi, va subito peggio quando ci sono anch’io. E anch’io mi sento meglio da solo.

DIDI Allora che sei venuto a fare?

GOGO Non lo so.

 

[…]

 

DIDI E’ difficile vivere con te, Gogo.

GOGO Sarebbe meglio lasciarci.

DIDI Dici sempre così. E ogni volta ritorni.

 

Silenzio.

sifting through all the ramaining files
counting down all the ramaining miles
drifting off into a dfferent night
paralyzed by all the warning lights
 
heavily drunk on distant love
 
I’d like u to stay
 
please, please, please let me let me let me
 
don’t go back to your hometown

Cernuda – Yo fui

Yo fui.
 
Columna ardiente, luna de primavera,
Mar dorado, ojos grandes.
 
Busqué lo que pensaba;
Pensé, como al amanecer en sueño lánguido,
Lo que pinta el deseo en días adolescentes.
 
Canté, subí,
Fui luz un día
Arrastrado en la llama.
 
Como un golpe de viento
Que deshace la sombra,
Caí en lo negro,

En el mundo insaciable.

Bécquer – leyenda : El rayo de la luna

Estará en cualquier parte, menos en donde esté el mundo.  

Manrique amaba la soledad,

y la amaba de tal modo que algunas veces hubiera deseado no tener sombra,

porque su sombra no lo siguiese a todas partes.

[…]

Habia nacido para soñar el amor,

no para sentirlo.

[…]

Manrique estaba loco; por los menos, todo el mundo lo creí así.

A mí, por el contrario, se me figuraba que lo que había hecho era recuperar el juicio.

 

Leon Felipe

PIEDRA DE SAL

Tu estabas dormida
como el agua que duerme en la alberca …
y yo llegué a ti
como llega
hasta el agua que duerme
la piedra.
Turbé tu remanso y en ondas de amor te quebraste
como en ondas el agua que duerme se quiebra
cuando
llega
a turbar su remanso dormida
la piedra.

Piedra fui para ti, piedra soy
y piedra quiero ser, pero piedra
blanda de sal
que al llegar a ti se disuelva
y en tu cuerpo se quede
y sea
como una levadura de tu carne
y como el hierro de la sangre en tus venas.
Y en tu alma deje una sed infinita
de amarlo todo … y una sed de belleza
insaciable …
eterna …

 

COMO HAN DE SER TUS OJOS

Mujer… no tendré un beso de niño para ti
ni de viejo, ni de sátiro…
cuando vengas no besaré tus mejillas
ni tu frente, ni tus labios.
Pondré mi boca en los pliegues
recogidos de tus párpados
y beberé el agua clara
que suba a tus ojos claros.
Trae unos ojos azules, mujer,
trae unos ojos azules, de un azul tranquilo y claro
que tengo sed…
sed de peregrino cansado
de muchas jornadas duras
por caminos solitarios
y quiero
llevar mis labios
al agua clara y tranquila
de un remanso que refleje
un cielo tranquilo y claro.

 

COMO HA DE SER TU VOZ…

Ten una voz, mujer,
que pueda
decir mis versos
y pueda
volverme sin enojo, cuando sueñe
desde el cielo a la tierra…
Ten una voz, mujer,
que cuando me despierte no me hiera…
Ten una voz, mujer, que no haga daño
cuando me pregunte: ¿qué piensas?
Ten una voz, mujer,
que pueda
cuando yo esté contando
las estrellas
decirme de tal modo
¿qué cuentas?
que al volver hacia ti los ojos
crea
que pasé contando
de una estrella
a
otra estrella.
Ten una voz, mujer, que sea
cordial como mi verso
y clara como una estrella.

BAricco – CITY

Sarebbe stato tutto più semplice se non ti avessero inculcato questa storia del finire da qualche parte, se solo ti avessero insegnato, piuttosto, a essere felice rimandendo immobile. Tutte quelle storie sulla tua strada. Trovare la tua strada. Andare per la tua strada. Magari invece siamo fatti per vivere in una piazza, o in un giardino pubblico, fermi lì, a far passare la vita, magari siamo un crocicchio, il mondo ha bisogno che stiamo fermi, sarebbe un disastro se solo ce ne andassimo, a un certo punto, per la nostra strada, quale strada? Sono gli altri le strade, io sono una piazza, non porto in nessun posto, io sono un posto.
 
non era più qualcosa che aspettava di partire. Era diventata una di quelle cose che hanno come compito rimanere, tenere ferme le radici di un qualche pezzo di mondo… E’ strano. Ci si va a cercare marchingegni incredibili per farsi portare via lontano, e poi li si tiene accanto con un amore tale che lontano, prima o poi diventa lontano anche da loro.
 
Stronzate, è solo questione di tovare una macchina, pensò.
Avrebbero trovato una macchina, tutto lì.
E sarebbero andati via lontano.